Vemos que la gran mayoría de noticias sobre accidentes de buceo, no son buceadores recreativos los infortunados protagonistas, sin embargo, cuando la gente, en general, piensa en un buceador, se forma la idea de un buceador recreativo, no de un practicante de apnea o de un pescador submarino. El buceo recreativo es el que permanece en la conciencia colectiva como “buceador”.
Las noticias que saltan a la prensa sobre accidentes de buceo llaman mucho la atención, con más intensidad cuando el accidente implica la muerte de alguna persona, quizás por la componente de aventura que acompaña a la idea colectiva de esta actividad. Este hecho nos perjudica como buceadores recreativos porque la asociación del buceo al peligro, aunque injusta por irreal, provoca encarecimiento de seguros, prohibiciones, reglamentaciones que a veces rozan el absurdo, por desconocimiento y también limitaciones por parte de muchas personas, que no se plantean iniciarse en esta actividad, por el aura de peligro que provocan estas noticias.
Hace poco tiempo, en esta Semana Santa pasada de 2017, ha saltado a casi todos los medios informativos cántabros y a otros medios informativos fuera de dicha región, la noticia de dos buceadores muertos en el mismo día. Precisamente por ser en el mismo día quizás ha sido una noticia repetida y con amplia divulgación.
Indagando para recibir más información de este triste suceso, nos encontramos con que las personas fallecidas estaban practicando la pesca submarina en solitario. Nos ha pasado lo mismo que a la mayoría de las personas, leyendo la noticia hemos pensado inmediatamente en un buceador recreativo, para descubrir después que no, que todo aquel que sufre un accidente en el agua llevando gafas y aletas, es etiquetado como buceador. Ha habido muchas más noticias con estos sucesos en las distintas prensas locales, aunque con menos impacto por tratarse sólo de una persona.
El buceo recreativo, practicado por personas correctamente formadas y certificadas, usando equipos de respiración subacuática, ha demostrado estadísticamente no ser en absoluto una actividad de riesgo. Por supuesto que ocurren accidentes, también ocurren accidentes en el interior del hogar, pero si observamos y cuantificamos los accidentes de buceo recreativo, resulta que su incidencia es casi irrelevante respecto al número de inmersiones que se realizan cada año en todo el mundo, por toda la comunidad de buceadores. Por ejemplo, esta misma Semana Santa última, al menos que nosotros sepamos, los accidentes mortales o muy graves en buceo recreativo (que son los que saltan a los medios) han sido cero. Este índice de accidentes es el que nos permite afirmar que el buceo recreativo-turístico (respetando las normas) es casi tan peligroso como pasear por el monte, algo que nadie considera excesivamente peligroso.
De nuevo, analizando las causas de accidentes que sí se han producido, se observa que la inmensa mayoría de ellos han sido debidos no a un solo error, sino a la acumulación de varios. Hay muy pocas excepciones a esta afirmación, la gran mayoría de accidentes en buceo recreativo son protagonizados por buceadores que se meten a bucear en entornos para los que no están preparados (cuevas, pecios, buceo profundo, etc.), aun habiendo cursos que te preparan para ese tipo de buceo. También se han producido accidentes en los que después se ve que no se han observado las más elementales normas de seguridad, normas que se aprenden ya en los cursos de iniciación.
Aprovechamos por lo tanto este comunicado para llamar a la cordura al conjunto de los buceadores. No debes meterte a bucear después de haber pasado toda la noche de juerga y bebiendo, tampoco con un equipo en lamentable estado o bajando a más profundidad de la que estás preparado. Mucho menos, si encima sumas varios factores de estos indicados, eso por poner algunos ejemplos, hay más.
Pero volvemos a la afirmación del principio. Afortunadamente, los accidentes en buceo recreativo son anecdóticos, muy pocos en relación con el número de inmersiones anuales de toda la comunidad de buceadores. De ahí la afirmación que el buceo recreativo es muy seguro.
No se puede decir lo mismo de la pesca submarina y de la apnea en general. El buceo en apnea deportiva tiene unos riesgos mucho más altos que el buceo recreativo, incluso si nos limitamos a los apneístas o pescadores experimentados. Mucho más, si lo extendemos a personas en vacaciones que, sin apenas saber teoría alguna de apnea, se compran unas gafas, un tubo y unas aletas y se dedican a la pesca o a la apnea en sus vacaciones. Estas personas son las que llenan los índices de accidentes y, como van equipados con unas gafas y unas aletas, son etiquetados como buceadores.
Que no nos confundan. Nos perjudica esa confusión, por lo que es labor nuestra, aunque sea una labor de hormiguitas, ir llamando buceo recreativo (no buceo a secas) a nuestra actividad y, cuando alguien hable de un buceador por llevar aletas y gafas, afirmar que somos buceadores recreativos, que lo otro es pesca o apnea, que sí entrañan peligro, pero no lo nuestro.
Por cierto y para terminar, señores de los medios informativos: No llevamos bombonas de oxígeno, sino botellas con aire comprimido, no de oxígeno.
Gracias por tu lectura y confiamos que haya sido de tu agrado este post. Al final de esta entrada verás una sección en la que puedes escribir el comentario que te parezca adecuado. Aparecerá publicado con el nombre que pongas pero no aparecerá el correo electrónico, para proteger tu privacidad. También bajo este párrafo hay un botón de suscripción que accede a un formulario para realizar dicha suscripción. Es gratuito y al suscribirte recibirás una notificación por correo electrónico, cada vez que se publique una nueva entrada en este blog.
Marc Otero
Completamente de acuerdo con el articulo. Como Divemaster es una argumentacion constante frente a quienes me preguntan sobre los riesgos del buceo. Personas a las que les encantaría probarlo pero que les da miedo sufrir un accidente. Explicarles que esta accidentalidad se relaciona con sujetos sin botella de aire, y con accidentes por desconocimiento e imprudencias como entrar en una cueva sin formacion o material es algo habitual en las charlas con la gente en general. Después, para los mas curiosos, siempre se puede aportar alguna explicacion breve sobre el problema de la hiperventilacion en apnea, de como afecta esto al instinto respiratorio al disminuir el CO2 en sangre y el efecto del sindrome del apneista (sin olvidar la larga espera para lanzar el arpon en el caso de la pesca).
Quisiera aportar una reflexion sobre algunos de los accidentes ocurridos durante la practica del buceo y que pueden relacionarse con patologias cardiacas que tambien podrian darse en qualquier otro entorno. En la mayoria de estos casos estamos hablando de personas de cierta edad que estan de viaje de buceo aunque muchos no lo practican habitualmente ni tampoco practican ninguna otra actividad física de forma regular (desconocemos si ademas existen antecedentes de estres o factores de riesgo asociados). El dia de la inmersion, las condiciones del mar no son las ideoneas o ellos mismos no se encuentran en las mejores condiciones físicas, de salud o de reposo pero como disponen solo de unos dias, entran al agua si o si a pesar de que lo juicioso seria reposar ese dia. El sobresfuerzo y ansiedad derivados de la situacion (anormal para lo que debe ser una inmersion recreativa) podrian favorecer la fatalidad de este accidente. En muchos de los casos, algun compañero o familiar manifestaba que esa mañana no se encontraba bien.
Esto podria ocurrir tambien tumbados en el sofa despues de un dia duro o realizando algun otro tipo de esfuerzo. La relacion directa con el infarto es posible si tenemos en cuenta el esfuerzo de la actividad con una corriente fuerte en contra por ejemplo pero siempre debemos pensar en un infarto relacionandolo con unos parámetros como, edad, habitos, genetica, lesiones, estres… En fin no soy mèdico y no me ampliaré en este sentido por falta de conocimiento pero esta claro que no aparecen en las noticias casos de infartos similares en gimnasios o tumbados en la playa tomando el sol y puedo garantizar que existen.
Como ya apuntaba el articulo, los accidentes como este relacionados con el buceo son infimos si los comparamos con la gente que sufre el mismo infarto a diario en el hogar, subiendo escaleras o haciendo qualquier otro actividad. Sin embargo el entorno donde se dan no generan noticia mientras que en el buceo si. Por desgracia, en la zona donde yo resido, los pocos accidentes relacionados con buceo son casi siempre estos estos tres casos. Buceadores inexpertos en cuevas, buceadores de extranjeros de vacaciones que sufren un infarto por causas desconocidas o accidentes mal llamados accidentes de buceo relacionados mas bien con apnea o pesca submarina.
Un saludo y felicidades por el blog. Aunque no acostumbro a escribir en ellos he pensado que poner mi granito de arena para apoyar el proyecto.
blogacuc
Gracias por tu comentario Marc
Veo que coincides más o menos con lo publicado.
Tu comentario es largo, sin duda, por lo que se ve que se te da bien escribir. Aprovechamos para invitarte a que escribas algo para ser publicado en el blog.
Saludos y mejores inmersiones
Marcos Ponce
En la mayoria de los casos los infortunios se producen por fallas humanas en distintos aspectos: falta de formación, exceso de confianza, falta de entrenamiento o mal estado físico. Lo negativo es que genera una mala imagen hacia la gente que no practica el deporte
blogacuc
Totalmente de acuerdo Marcos